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La mayoría de autores diseñan la contraportada de un libro una vez han terminado su obra y la han maquetado. Lo hacen así porque son conscientes de la importancia que tiene para el lector: le permite saber si le interesa un libro o no en pocos segundos.

Si trabajas con una editorial, lo normal es que cuente con diseñadores profesionales para realizar las contraportadas de un libro (se suelen preparar dos o tres para elegir la mejor). En caso de optar por la autoedición, te dejamos las claves para elaborarla bien. Recuerda que también puedes solicitarnos asesoramiento para tu obra en particular.

Qué es la contraportada y para qué sirve

Si tienes dudas sobre qué es la contraportada de un libro, es la cara externa opuesta a la portada de libro y acostumbra a contener cierta información: resumen introductorio, que no has de confundir con una sinopsis, y datos sobre el autor o la propia obra.

Escribir una contraportada no es tarea compleja, aunque sí requiere pararse y hacerlo con calma, barajando más de una opción al principio, porque es importante adaptar la contraportada a tus potenciales lectores.

En cuanto al diseño, la contraportada se realiza después de la portada y debe utilizar colores y tipografías compatibles con ella. Si incluye fotografías o ilustraciones, de nuevo, estas deben adaptarse al estilo editorial de la portada, sin perder de vista el fin último: atrapar al lector para que siga leyendo más allá de la primera frase y permitirle saber si el libro que tiene en sus manos le puede interesar o no.

En muchos casos, añadimos una breve biografía del autor para ayudar al lector en su decisión. Será algo sucinto y alejado de la grandilocuencia, acompañado en ocasiones de una pequeña foto del rostro del autor (en especial, si ya tiene más obras publicadas).

Cómo hacer una contraportada

Para que aciertes cuando tú mismo haces tu primera contraportada, te dejamos una lista de buenas prácticas y otra de errores a evitar.

Buenas prácticas

  • Toda contraportada debe contener texto; las imágenes son opcionales, aunque recomendables. La extensión aproximada rondará las 150-200 palabras aproximadamente.
  • El resumen del argumento no puede contener demasiada información. No debes desvelar aspectos importantes de la trama si tu libro es una novela, pero tienes que ser capaz de transmitir al lector de qué trata tu obra y su estilo.
  • La primera frase del resumen, que es lo que colocas en la parte superior del espacio de la contraportada, es la más delicada. Piensa bien qué decir y con qué estilo de redacción.
  • La biografía (muy breve) del autor es opcional, aunque ayuda a conectar con el lector si se realiza bien.
  • El texto de una contraportada debe ser fácil de leer sin necesidad de detenerse, con párrafos bien separados entre sí y fuentes que favorezcan una lectura rápida.

Errores en contraportadas

  • Confundir resumen introductorio con sinopsis o contar demasiado sobre el argumento.
  • No presentar al personaje principal, aunque sea mencionándolo en una frase importante del resumen.
  • Biografía de autor demasiado extensa o centrada en los logros antes que en ese libro concreto.
  • Diseño que no concuerda con el de la portada.

La contraportada de un libro ayuda al lector a saber si una obra le interesa o no en pocos segundos y al autor a conectar con el tipo de lectores a quienes se dirige esa obra en concreto. Las editoriales prestan mucha atención a las contraportadas porque son conscientes de su repercusión en las ventas. Sin embargo, hacer una buena contraportada no es muy difícil si conoces las claves y tienes nociones de diseño editorial.

Cada estilo literario suele tener sus propias directrices, basadas en las preferencias de los lectores. Si no tienes claro qué funciona mejor en tu campo, puedes solicitar asesoramiento o encargarnos el diseño.

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